1. NÁPOLES
Cuando me mudé al barrio, hace ya casi una década, esta pizzería quedaba en la esquina de Av. Corrientes y Serrano. Recuerdo que era muy grande y retro (¿acaso estaba decorada con potus?). Un día cerró y comenzaron a circular todo tipo de rumores: el principal se refería a que volvería a abrir en un local más pequeño, a pocos metros, sobre la avenida. Por suerte, después de un tiempo, el chisme se concretó. Suelo ir un sábado por mes, al mediodía, con mi tío. Siempre pedimos lo mismo: una pizza chica de mozzarella, dos fainás, una porción de fugazzeta y dos Coca-Cola Light. Y el mozo que usualmente nos recibe nunca lo olvida. Ni siquiera tenemos que hacer el pedido una vez que nos sentamos.
Av. Corrientes 5588.
2. CONVOI
Imposible descubrirlo al pasar. El nuevo espacio dedicado a la fotografía contemporánea funciona a puertas cerradas, en un antiguo PH que conserva un hermoso árbol de quinotos. Cuenta con una sala de exhibición para muestras, una librería especializada y talleres afines. Sus creadores -Federico Paladino, David Leda y Pilar Villasegura- son personas que admiro por su contribución al mundo de las publicaciones independientes. Sugiero ir en días de inauguración o concertar una cita por mail, porque no tiene horarios fijos de atención al público.
Malabia 1066.
3. YEITE
Es mi restaurant favorito para el brunch de los domingos. Se sitúa alejado de la zona comercial del barrio, frente a la cancha de Atlanta. Forma parte de la tienda de la diseñadora Jessica Trosman y su carta está a cargo de la chef Pamela Villar. Me encanta sentarme en la vereda, pues nunca tropiezo con distracciones. ¡El entorno es tan desolado! Entre mis platos predilectos se encuentran el tabule verde y el sándwich de vegetales con brie. También el volcán de chocolate.
Humboldt 298.
4. COCKTAIL DISCOS
Abre los sábados y domingos en el puesto 37, sobre la callecita Lillo, entrando por Leopoldo Marechal, en Parque Centenario. Tiene el más amplio surtido de vinilos de rock, punk y postpunk que haya visto en Buenos Aires. Su dueño, Leonel Lydon (vaya apellido homenaje a su amado John) es un gran asesor: cuando conoce tu gusto, se vuelve hábil para recomendarte otros discos que seguro serán de tu agrado. De cada artículo que tiene, sabe el país de origen y número de edición. Ideal para los obsesivos en la materia. A él le compré dos álbumes que amo: “Perhaps”, de The Associates, y “Second Edition”, de
Public Image LTD.
5. KON KON
Es un nuevo restaurant especializado en cocina a leña y al paso. Ofrece shawarmas, sándwiches de bondiola o falafel y hamburguesas. Se distingue por la elección y especial combinación de verduras y salsas que utilizan en sus recetas. Las papas adoptan un sabor ahumado riquísimo. Me gusta ir con amigos, antes de ir a un pub o luego de algún evento.
Juan Ramírez de Velazco 942.
* Organizadora de eventos, periodista y escritora. Vive en Corrientes y Thames.